En tren de abrir siempre el juego, el arte de COMPARTIR es una actividad cotidiana que nos permite sacarle el jugo a la vida, estar abiertos a lo que vendrá, porque la vida del que comparte es mucho más aventurera e incluso complicada que la del pasivo continuo, el que se guarda las cartas esperando el momento propicio para hacer su minimo aporte.
Compartir es dar a conocer lo que nos pasa, lo que queremos, lo que nos da la ganas, para que en conjunto se pueda ver qué hacer con lo expresado.