Lo que se mete en el cuerpo a través de la ingesta (líquida, sólida y hasta gaseosa -no coca-cola, sino el aire a través de la respiración), es lo que dará vida a las energías suficientes para llevar adelante acciones.
El espacio que nos rodea, los grupos de pertenencia y la interacción con las personas, es lo que determinará lo que nos ingrese a través de los pensamientos, nos brinda el en qué pensar.Estar atento a estos cambios es central, creo yo, para sentirse cada vez más sano, y por ende feliz, en la vida.